Leo blog de homeschooling en tres idiomas: en inglés, fundamentalmente blogs de USA, Sudáfrica y algún que otro canadiense. En francés, todos de Francia. Y en español, claro, la mayoría de España y alguno de Sudamérica.
Algunos de los franceses son realmente buenos, aunque mis preferidos son los norteamericanos. Me gustan los blogs que reflexionan acerca del homeschooling: en qué consiste, por qué lo hacemos, por qué es una opción tan poco comprendida, qué dudas seguimos teniendo los que lo hacemos, etc.
Pero hay tres tipos de blogs, que abundan entre los españoles, que me resultan odiosos. Lo sé, cada uno es muy libre de hacer su blog cómo prefiera, pero creo que hay blogs que deberían ser privados, verbigracia, aquellos que son un simple diario de actividades de los niños y que no alcanzo a comprender a quién pueden interesar. Vale, a veces se sacan recursos interesantes de esos blogs, pero no es lo habitual. No me aporta mucho leer un blog en el que me cuentan que el domingo fueron al zoo, que el lunes vino la abuela a comer y que el martes los niños jugaron con las regletas cuissenaire.
Luego hay blogs que son sustitutos del psicoanálisis. Aquellos en lo que las madres dan una imagen de perfección en todas sus facetas: como madres, como educadoras, como amas de casa, como esposas, como blogueras, etc. No sabría decir si se trata de madres narcisistas o si, por el contrario, son mujeres con una autoestima tan baja que lo único que les queda es su vida fake en internet, vida que, para colmo, construyen a través de los "logros" de sus hijos y no de los suyos propios.
Y, por último, están las que se dedican a compartir las recetas de cocina de su abuela o, para el caso, del sacrosanto Jamie Oliver, con fotos y todo para que veas lo bonita que les queda la tarta que tú tienes que comprar en la pastelería de la esquina porque ni siquiera te atreves a intentar hornearla tú misma.
Pero los peores, sin duda, son los blogs que reúnen las tres características mencionadas. Son blogs de madres que padecen el Síndrome de Bree Van de Kamp, las pobrecitas. Y son los blogs que he eliminado de mi GoogleReader.