lunes, 19 de octubre de 2015

Sayonara, baby



Tengo el blog abandonado, así que he decidido que lo más sensato es darlo por terminado. No lo cierro/elimino porque sorprendentemente sigue entrando gente todos los días, pero ya no voy a escribir más.

Podéis encontrarme en Facebook donde iré actualizando la página a modo de diario. Gracias por la compañía y los mensajes.


sábado, 29 de noviembre de 2014

Titulitis. Big fail.



Voy a ser clara: a mi me gusta el homeschooling y no lo cambiaría por nada del mundo. Ni por la mejor escuela del mundo, ni nada de nada.

Pero también me gusta poder hablar de las cosas malas del homeschooling. También tengo dudas. Y hay momentos en que lo mandaría todo a la mierda, mandaría al niño al colegio y seguiría mi vida como si aquí no hubiera pasado nada. Son sólo pequeños momentos. Como cuando tienes un bebé y estás sola y tienes que trabajar y no puedes atender a tu bebé porque necesitas que alguien te atienda a ti. Pero no hay nadie. Así que lanzarías al bebé por la ventana.

Lo harías, os lo juro. Sólo que es una de esas cosas que no se pueden decir.

Tampoco se puede decir que el homeschooling no es absolutamente maravilloso y perfecto todo el tiempo. Ni que tu hijo no es el más listo, el más aplicado, el más mejor en todo.  A veces pareciera que las familias homeschoolers competimos por ver quién de nosotros lo hace mejor que la escuela y quien cría el genio más espectacular. Después de criticar el sistema y la titulitis durante años, a algunas se les cae la baba por completo cuando es su hijito querido el que logra titularse o entrar en tal o cual universidad o conservatorio o escuela de lo que sea. Y me parecería estupendo si no fuera porque quienes tienen blogs (y sobre todo quienes tienen blogs con muchos seguidores) tienen una responsabilidad y, algunas de esas, se han pasado años haciendo que otras se sintieran mal por querer que sus hijos siguieran un currículum, se titularan y fueran a la universidad. Y después de todas las discusiones, de todas las decepciones y del auto flagelamiento, ahora tienen que ver cómo quienes las criticaban duramente por sus objetivos educativos ahora se ponen en un pedestal porque sus hijos han logrado aquello que ellas siempre criticaron.

Vivir para ver. De verdad. Este "colectivo" nunca deja de asombrarme.




lunes, 22 de septiembre de 2014

¿Ya tienes tu carnet de homeschooler?



Hace dos años dejé este blog porque estaba tomando unas dimensiones con las que ya no me sentía cómoda. Este blog, lo dije muchas veces, es parte humor, parte información y parte desahogo. No soy experta, no quiero ser gurú, no quiero ni puedo asesorar a otras familias. Así que lo dejé pensando en no volver pero hoy leí un artículo que me ha removido cosas y al que quiero contestar. He vuelto después de dos años y me he llevado la agradable sorpresa de que el blog ha seguido teniendo visitas todos los días. No sé cada cuánto voy a escribir, pero aquí estoy de nuevo.

El artículo que he leído lo publica Homeschooling Spain, lo firma Azucena Caballero, se titula "No, tú no eres homeschooler" y empieza con esta advertencia: "Esta nota levantará ampollas porque a nadie le gusta que le digan que no es alguien que pretende ser". Sobre el tono del artículo no voy a comentar nada porque cada uno tiene su propia forma de expresarse o -si es suficientemente bueno en ello- elige la que mejor le parece en cada ocasión.

Entonces pasa a enumerar cuatro situaciones en las que, según ella, uno no es homeschooler:

1) Si tu hijo va al colegio. En este punto estoy de acuerdo. Ser homeschooler es, precisamente, educarse sin ir al colegio. Lo que pasa, creo, es que a veces al usar la expresión "educar en casa", los que escolarizan nos dicen "eh, que yo también educo en casa". Pero es difícil encontrar una expresión corta y directa para referirnos a lo que hacemos.

2) Si tu hijo es menor de tres años. Según el artículo, hasta los 3 es crianza. Después empieza la educación. Me gustaría saber en base a qué criterio establece la edad de 3 años como paso de la mera crianza a la educación.

3) Si tu hijo es menor de seis años. La explicación no tiene desperdicio: "Puesto que la escolarización obligatoria no empieza hasta los seis años, si tu hijo es menor de esa edad, por muchas cositas que hagas con él, no eres homeschooler en realidad, estás dentro de la legalidad, disfrutando de estar con tu hijo unos años más como la ley prevee, y si a partir de los seis escolarizas no habrás sido homeschooler nunca, sencillamente escogiste criar sin usar jardines de infancia ni parvularios." Tengo unas cuantas preguntas: Primera: ¿si un día cambian la ley y se pone la escolarización obligatoria a los 2 años, entonces eso que será? ¿Crianza, educación o homeschooling? Segunda: si ahora la ley permitiera el homeschooling, ¿todos dejaríamos de serlo? Tercera: en los países en los que la ley sí permite el homeschooling, ¿no hay ningún homeschooler? Porque no están fuera de la legalidad así que, según ella, no es homeschooling. [De verdad que intento entenderlo, pero no soy capaz]

4) Si tu hijo está en el CIDEAD. Dice: "Si tu hijo está inscrito en el colegio a distancia del Ministerio de Educación tu hijo está escolarizado, no solo ha de seguir exactamente el mismo sistema y programa que cualquier colegio homologado por el plan estatal solo que desde casa, y por lo tanto no hay libertad ni de temario, ni de formato, es lo que marca el Estado sin más, si que además estás dentro del engranaje estatal, jamás te podrán denunciar ni poner problemas, tu hijo sí está escolarizado de forma legal a todos los niveles. No eres homeschooler, tu hijo está escolarizado." De ahí se desprende: 1) que si tu hijo está escolarizado a distancia pero en otro sitio que no sea el cidead (como en algunos negocios que ella misma tiene o ha tenido), entonces sí eres homeschoolers, porque estás ilegal. 2) que si no estás en ninguna escuela a distancia pero sigues el programa, los métodos y todo lo que implica seguir el "plan estatal", entonces tampoco eres homeschooler.

El resumen es que ser o no ser homeschooler depende de tu situación legal. El resumen es que ella es quien decide quién es y quién no es homeschooler. Ella da los carnets. El resumen es que, como dice su socia Mireia Martín (alias Mireia Long) en Facebook, no tienes derecho a hablar de educación en casa si no educas en casa. Así que cada uno podemos hablar sólo de lo que sí hacemos.





¿Y tú? ¿Cumples los requisitos? ¿Ya has ido a que te den el carnet oficial de homeschooler?


domingo, 7 de octubre de 2012

Parad el carro


Al final ha empezado a sucederme lo que, al parecer, les sucede a muchas madres homeschoolers que bloguean. Resulta que hay otras madres, que todavía no son homeschoolers pero que tal vez quisieran serlo, que nos escriben para pedirnos consejo y orientación.

Ok, a mi me costó lo mío dar un paso al frente y decidir educar a mi hijo en casa contra viento y marea. Me informé todo lo que pude. Leí blogs, artículos y libros. Vi documentales, debates y entrevistas. Pensé mucho. Hablé poco. Pero no llamé a nadie para pasarle la pelota de decidir por mi; no le pedí a nadie que me diera el empujón que me faltaba. Si os falta un empujón para terminar de decidiros, tal vez es que esta opción no es la más adecuada para vosotras. O tal vez sí pero, desde luego, no soy yo la más adecuada para daros ese empujón. Me alegro de que os guste leer mi blog, de que os calme según qué dudas y paranoias, pero dejadlo ahí. No soy consejera; no soy asesora; no soy experta en nada. Bueno, soy experta en mi hijo y en mi familia, pero no en los vuestros.

Pienso que algunas os queréis seguir autoengañando. Está bien, lo respeto, pero no esperéis mi bendición. Imaginao que, desde lo más profundo de la caverna en la que os halláis, algunas habéis comenzado a  intuir luces ahí afuera, pero no queréis asomaros por si acaso, por si la realidad es demasiado para vosotras. Está bien, pero no pretendáis involucrar a los demás. La culpa no es de Magritte. Él sí pintó una pipa.

jueves, 30 de agosto de 2012

Tú sí, peeerooo....


¿Quién dijo que no se puede? Siempre hay alguien haciendo algo que otros dijeron que era imposible. Prueba a intentarlo.


Vale, ya sé que los puntos suspensivo son tres, no dos, ni siete, ni cuatro y que por tanto al título le sobra uno. Pero es para enfatizar, ustedes me entienden....

El homeschooling en España es como el río Guadiana. A veces desaparece, es como si no existiera. Pero hay otras veces en que reaparece y es como si todo el mundo estuviera pendiente de nosotros. Eso sucede:

a) cuando se acerca el inicio del curso escolar (o sea, en agosto-septiembre)

b) cuando una familia es llevada a juicio, gane o pierda, pero sobre todo si pierde

c) cuando la mayor agencia de noticias utiliza el tema para titular una noticia sobre la reforma educativa, algo como ésto.

Si, como es el caso, coinciden en el tiempo las opciones b) y c), entonces el despiporre ya es total. Y tenemos a los medios de comunicación encima, a veces con respeto y otras veces en plan amarillista. Y a gente que vive felizmente instalada en el Día de la Marmota opinando alegremente sobre cómo y por qué debería prohibirse el homeschooling. Les da igual que les digas que Hitler también lo prohibió, como quieren hacer ellos; inevitablemente te salen con que si "ahora vas a decir que los vegetarianos son malas personas y genocidas en potencia".

A lo que iba: normalmente, cuando enfrentas sus sesudas opiniones [basadas en ninguna evidencia y ningún conocimiento personal] a tu propia experiencia, recurren a lo fácil que es decirte que, en general, consideran que el homeschooling es una mala idea pero que, como excepción, gente como sí puede hacerlo porque, claro, tú fuiste a la Universidad (da igual que estudiaras Física que Filología que Derecho, hay quien considera que cualquiera que sea licenciado está capacitado para dar educación académica a los niños) y tú sí cuidas a tus hijos y etcétera etcétera.

O sea, que después de explicar brillantemente por qué el homeschooling debería estar prohibido, resulta que la única excepción admisible ¡¡eres tú!! ¿¿¿No es maravilloso como el Universo crea sincronías en nuestras vidas???

Viene a ser como cuando te dicen que esto de la crianza sin castigos es una mamarrachada pero que qué suerte has tenido tú, que te han salido unos hijos taaan educados.

Pero la cuestión es: ¿quién se creen que son ellos para decidir cómo debe cada uno educar a sus hijos?